“No dialicemos la enfermedad renal crónica. Apostemos por la prevención y detección temprana”
Secretaria Ejecutiva del organismo junto a connotados médicos nefrólogos analizaron y presentaron propuestas para mejorar la intervención contra la enfermedad en Webinar organizado en el marco del Día Mundial del Riñón.
La Secretaria Ejecutiva del Organismo Andino de Salud-Convenio Hipólito Unanue (ORAS-CONHU), doctora María del Carmen Calle Dávila, invocó a la comunidad científica y autoridades de salud a implementar, prioritariamente, políticas preventivo promocionales contra las enfermedades asociadas a la enfermedad renal crónica, como la hipertensión y diabetes, y asegurar un diagnóstico oportuno, dado que representa un ahorro económico para los sistemas de salud.
“No dialicemos la enfermedad renal crónica, pues debemos aportar por el tema importante de la prevención y el diagnóstico precoz”, sostuvo así la titular del ORAS-CONHU durante su participación en el Webinar: Enfermedad Renal Crónica, la emergencia de su abordaje y el camino hacia el logro de la salud renal para todos.
En el evento organizado por el ORAS-CONHU en el marco del Día Mundial del Riñón, que se conmemora cada 10 de marzo, participaron destacados médicos especializados en Nefrología, quienes coincidieron que la enfermedad renal crónica es un serio problema de salud pública que silenciosamente sigue avanzando a nivel mundial y en países de la región andina.
La doctora Calle destacó que su institución viene trabajando en el manejo y control de las enfermedades no transmisibles, el sobrepeso y la obesidad, y la enfermedad renal crónica, a través de la elaboración de documentos técnicos para el diagnóstico de la situación actual en los países andinos, así como la construcción de políticas que permitan el control, diagnóstico y prevención de este grupo de enfermedades.
Además, mostró su preocupación debido a que la carga global de esta enfermedad está aumentando rápidamente, con una proyección de convertirse en la causa más común de años de vida perdidos en todo el mundo para el 2040.
“Si no logramos controlar el aumento de las enfermedades crónicas incluyendo la enfermedad renal crónica se verá seriamente amenazada la sostenibilidad de los sistemas de salud. Los estudios sugieren que la enfermedad renal cónica debe ser abordada con prioridad debido a que la morbimortalidad incrementa los ratios de mortalidad prematura a causa de enfermedades no transmisibles”, apuntó.
Frente a ello, propuso que es importante la implementación de programas integrales para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares en los pacientes renales, a través de un plan nacional que integre los servicios de salud desde el primer nivel de atención.
Nefrólogos en acción
Durante su intervención, el presidente de Sociedad Latinoamericana de nefrología e Hipertensión (SLANH), Jorge Rico, indicó que la enfermedad renal crónica está avanzando debido, en parte, por el envejecimiento de las poblaciones, la pobre búsqueda proactiva en sus etapas iniciales y las mínimas intervenciones preventivas.
“Ello ha desencadenado intervenciones tardías con casos complicados donde se requieren diálisis o trasplante para darle una alternativa de sobrevida al paciente”, dijo.
El nefrólogo colombiano advirtió que, en la región andina, se tienen pocos datos de los pacientes que no están en diálisis. Citó el ejemplo a Ecuador, que tiene muy bajo registro de pacientes, pues la proyección estimada es de 1 millón 800 personas afectadas, pero se tiene reportado solo menos del 2% en este país.
“Lo mismo pasa en Colombia donde se reportó 850 mil pacientes con enfermedad renal crónica. En realidad, este país tiene 50 millones de pacientes, por lo que se debería tener como 5 millones de pacientes afectados”, detalló.
De este modo, Jorge Rico evidenció el problema de la falta de registros unificados de pacientes, ya que en otros países se realizan encuestas por separado como lo hacen las sociedades científicas y los datos de los ministerios de Salud, también los datos que aportan la parte privada y la parte pública.
“Se tiene que unificar esos criterios para conocer los datos reales de la situación de la enfermedad renal crónica. Pero, para conocer los datos, es necesario diagnosticar y buscar a los pacientes”, recomendó el especialista.
Por su parte, el vicepresidente regional de la SLANH, Fabián Ortiz, sostuvo que se debe trabajar sobre los factores de riesgo para disminuir la afectación de la enfermedad, como reducir el consumo de tabaco, tomar en cuenta la edad avanzada, la aparición de la diabetes mellitus y la hipertensión arterial, que afectan la función renal, y el bajo peso al nacer, cuyas personas nacidas antes de la semana 30 de gestación presentan reducción de la masa renal, así como la raza afroamericana y las personas de estrato socioeconómico bajo.
El nefrólogo ecuatoriano mostró su preocupación por la alta demanda de respuesta médica a los millones de casos, tomando en cuenta que “en Latinoamérica existe aproximadamente ocho médicos especializados en nefrología por cada millón de habitantes, cuando el estándar internacional recomienda que deben ser 20 los especialistas”, puntualizó.
Finalmente, el médico nefrólogo de la Universidad de Buenos Aires (Argentina), Santos Depine, resaltó la importancia del examen o dosaje de albuminuria para la detección temprana de la enfermedad, toda vez que, según estudios, el 9.6% de las personas mayores de 40 años, con hipertensión y diabetes, tiene albuminuria aumentada.
El especialista consideró que la enfermedad renal crónica puede considerarse como una sindemia, es decir, más que una pandemia, porque está condicionada por lo social y lo biológico.
“Es importante que los decisores de salud aborden los determinantes sociales de salud para lograr mejores resultados y obtener retorno de la inversión. También que diseñen intervenciones efectivas, incluyendo evaluaciones y mejoras, y establecer alianzas con otras organizaciones para abordar los determinantes sociales”, sugirió.
El Webinar fue moderado por la doctora Magda Hinojosa, coordinadora de Curso de Vida y Áreas Temáticas del ORAS-CONHU.
El dato:
- En América Latina se registran 5,5 millones de muertes por enfermedades no transmisibles por año, lo cual constituye en la primera causa de mortalidad. Solo en el 2017 se reportaron 1.2 millones de muertes por enfermedad renal crónica.
Lima, 18 de marzo de 2022
ÁREA DE COMUNICACIONES
ORGANISMO ANDINO DE SALUD – CONVENIO HIPÓLITO UNANUE