Inmunización: Urgente prioridad sanitaria para la Región
1. La inmunización ha traído grandes beneficios a la humanidad: disminuye la mortalidad y la discapacidad en los niños, jóvenes y adultos, y mejora nuestra calidad y expectativa de vida.
2. Al vacunar se protege a la población de múltiples enfermedades inmunoprevenibles. La vacunación salva, anualmente, de 2 a 3 millones de vidas, y es la actividad de salud pública más costo efectiva, segura y beneficiosa de los últimos dos siglos.
3. Según el informe conjunto de OMS y UNICEF, enfrentamos la peor caída consecutiva de vacunación en 30 años. En 2021, se calcula que 25 millones de niños en el mundo no han recibido una o más dosis de vacuna contra difteria, tos ferina y tétanos. Ello significa un incremento de 2 millones de niños desprotegidos con respecto al 2020 y de 6 millones con respecto al 2019. La baja cobertura de vacunación contra el sarampión y la poliomielitis pone en riesgo de reemergencia de estas enfermedades.
4. En las Américas la situación ha seguido esta tendencia global, y se vio agravada por la pandemia. En 2021, más de 2,6 millones de niños en la región no estaban vacunados o no estaban totalmente al día en sus vacunas contra la poliomielitis, el tétanos y la difteria.
5. Hace 31 años erradicamos la poliomielitis de las Américas, y hace más de 6 años eliminamos la rubeola y el sarampión. Recuperar las altas coberturas vacunales requiere decisión firme y contundente desde el más alto nivel político y compromiso de la comunidad.
6. Tenemos el deber de proteger a toda la población: niños, niñas, adolescentes, gestantes y adultos mayores, que deben recibir sus esquemas completos de inmunización para proteger y salvar sus vidas.
7. Las vacunas son seguras, gratuitas y de calidad. Están disponibles en los centros de vacunación de nuestros países andinos.
Lima, 9 de agosto de 2022